Repentinamente en una de las calles de corzon se podía escuchar el chasquido de una persona que corría en los charcos, se notaba que este individuo tenia mucha prisa.Sus zapatos se encontraban llenos de lodo por la lluvia, llevaba una capucha negra que no permitía que se le viese el rostro.
El encapuchado se dirigía hasta un túnel hecho de piedra, se detuvo a la entrada, al final del túnel había un individuo que solo se le podía ver los ojos de un color verde de una mirada desafiante.
El encapuchado sin importarle nada empezó a correr pasando por el lado de aquel hombre y al mismo tiempo los ojos de aquel se le iban poniendo de un color negro intenso y cuando estuvieron lado a lado aquel hombre emitió unas palabras, sigilosamente, en ese instante hubo un gran trueno que se le permitió verle el rostro al encapuchado era un hombre que tenia algunos mechones que cubrían su frente, era de color dorado, con la piel muy pálida se notaba que estaba petrificado, tenia los ojos blancos como si hubiese escuchado una mala noticia.
Sin embargo el corrió desesperada mente dejando al otro hombre atrás hasta llegar a las fueras del pueblo, había una casita pequeña echa de piedra una de sus ventanas se encontraba iluminada lo que permitía que se viese el bosque que estaba detrás de la casa.
El hombre entro sin demora abriendo la puerta con una gran fuerza, frente a el había una dama que se encontraba junto a una chimenea, tenia una tes muy clara, los ojos de color marrón oscuros, su cabello era negro que llegaba hasta los hombros, tenia puesto un vestido blanco, entre sus brazos se encontraba un bebe, se notaba que lo esta arrullando tierna mente.
Ella sin demora se levanto de la silla dirigiéndose a una habitación donde dejo a la criatura y salio corriendo hacia el hombre, cogiéndole sus manos que se encontraba frías, ella quería llevarlo a que se siente junto a la chimenea para que se calentase, pero el con su poco aliento que tenia, le dijo: no Anabel, tenemos que sacar a los niños de aquí, ya es hora.
El entro en uno de los cuartos que tenia la luz prendida en el había dos niños durmiendo, el desde la puerta con una voz fuerte dijo Samuel, Petter despierten. El niño mas grande se despertó tenia unos 9 años de edad, el mismo color de cabello que el hombre, e igual color de ojos que la dama y con una mirada dulce el niño miro al hombre, dio un gran salto de su cama, corrió donde el con una gran sonrisa, estiro sus brazos con gesto de abrazarlo, pero repentinamente el hombre se agacho poniéndose al mismo nivel del niño y detuvo el intento de abrazo cogiéndole de las manos.El niño pequeño de uno 6 años de edad, su color de cabello es marrón los ojos de igual color que el hombre al ver ese cuadro se puso a llorar y comenzó a decir papa.El hombre miro al niño pequeño y al mismo tiempo le decía samuel hijo, tienes que cuidar a tus hermanos, ellos ya vienen.
El padre de los niños se acerco a su hijo, que estaba llorando, muy paternalmente le cogió la cabeza, y le decía petter ya es es ora que te levantes, el niño alzo la mirada y vio como su padre le sonreía y le decía coge tus cosas como te enseño tu mama y has caso lo que te diga tu hermano. Petter se seco las lagrimas y se bajo de la cama cogió su mochila y comenzó a guardar sus cosas.
En la otra habitación se escucho el sonido de una lampara rompiéndose, samuel vio como su padre salia de la habitación cerrando la puerta, pero la perilla no cerro del todo, el se asomo y vio a su madre sentada en el piso tratando de recoger lo vidrios rotos y al mismo tiempo se encontraba llorando, anabel dijo con voz muy triste mirando a su esposo anul porque a hora justo cuando estábamos siendo muy felices, los niños son muy pequeños. Anul se acerco a su esposa cogiéndole las manos y con su otra mano le iba secando las lagrimas,en eso anul miro a la habitación de sus hijos y vio a samuel que estaba entre puerta y emito un sonido fuerte y le dijo: samuel has lo que te dije.
continuaraaaa.....::::::::::::
